lunes, 28 de mayo de 2012

Viajar hasta mallorca - 10


Cuando mis padres llegaron de “ mallorca “, mi madre entró en casa con el bolso abierto de sacar el dinero para darle una propina  al taxista y la chaqueta colgándole del hombro - el taxista , que ya estaba jubilado, era amigo de la familia y después de la comida, que pararon a mitad de camino a comer una carne a la piedra, solo le aceptó para el pago del combustible - .
Me dio sendos besos en las mejillas, me pusó un collar de perlas majoricas en las manos y me dijo : - Ayuda a tu padre a meter las maletas en casa -
Como siempre mi madre no se fijó para nada en lo ordenada y limpita que estaba la casa al llegar.
* Yo esperaba un : - ¡ Oh... Así da gusto llegar a casa marise ! –.
 O esperaba : - ¡ Marise, mucho nos debiste de echar en  falta a tu padre y a mi ! -.
 O bien : - ! Caramba marise no conocía yo esta faceta tuya ! - .
Mi madre tiene un detector de averias y de cosas mal hechas que funciona a la perfección , pero no le detecta que el detector de aciertos y de cosas bien hechas hace tiempo que no le funciona.

El taxista ya era algo mayor y tenía un viejo haiga * un Dodge 3700 GT fabricado por barreiros, con el que íbamos todo el pueblo a la coruña, en las grandes ocasiones al juzgado, porque ir en el haiga se había convertido en un amuleto, como el que lleva en el bolsillo una pata de conejo. - Hola marise -, me dijo el taxista al verme salir de casa para recoger las maletas.- 
 
El taxista había ido a primeras horas de la mañana a recoger a mis padres al aeropuerto de labacolla, en santiago de compostela. Mis padres no son muy dados a molestar pero habían llamado a su amigo por el cansancio del viaje de regreso y el haber tenido que dormir en el aeropuerto en madrid hasta que mejorasen las condiciones climatologicas del aeropuerto de galicia.
 En el viaje de vuelta, mi padre todo contento por regresar de nuevo a su tierra,  vino hablando de sus vacaciones y contando que habían alquilado un coche - El coche - decía mi padre, - todo un exito , y no había parado de dar vueltas con el todos los días - ; mientras mi madre desde el asiento de atrás le apostaba - con sorna pero advirtiendo a mi padre para que no metiera la pata - ¡ Y mira que no es pequeña la isla para dar vueltas, parecía que estábamos en un tiovivo ! -.
El taxista y su " haiga" en otros tiempos habían recorrido media europa llevando emigrantes que habían regresado ricos. Y  tenía , con la afición de futbol local, acompañado al depor * Real Club Deportivo de la Coruña, a muchos partidos en que nuestra selección había salido siempre victoriosa, más o menos.
Aún ya mayor y jubilados los dos, pues el Dodge estaba dado de alta como vehículo historico, con tantos viajes que habían hecho y tantos recuerdos que guardaban, seguían corriendo por las carreteras, porque no podían faltar en bodas, bautizos y romerías que se considerasen de prestigio, y en todas ellas hacía broma de que él y su queridisimo “haiga” no iban a morir sin cruzar el mediterraneo en un puente hasta mallorca.

Una vez terminamos de descargar las maletas y meterlas en la casa, yo me despedí del taxista dandole unos besos.
Y los dejé, a él y a mi padre, hablando en la acera .
 Mientras entraba en la casa se oía  como mi padre, continuando con su historia decía :
- ... ¡ Si ... y allí en los semáforos no es como aquí ... ! -

Mi madre se había cambiado y estaba pegada al teléfono actualizándose, y así se enteró de entre otras cosas del encierro del sisa.

Por la noche, cuando todos marchamos a dormir, mi madre tuvo un sueño en el que vió al sisa cuando era pequeñito.
Estaba en su cama para bebe de madera, con sus barrotes para que no escapara, y el sisa en pañales , mientras trataba de meter la cabeza entre dos barrotes, agarrandose a la barandilla con una mano, sujetándose para no caer de culo, sacaba la otra mano extendida pidiendo que alguien lo sacara del corralito y lo cogiera en brazos .


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lunes, 21 de mayo de 2012

los de la batea pasaban mas tiempo en el mar - 9



Los de la batea pasaban más tiempo en el mar que en tierra. Y cuando estaban en tierra, en el medio de la noche no había atajo ni recodo ni recoveco del terreno que no conociesen y por el cual pudieran andar sin desviarse unos centímetros del camino.

Hasta donde la memoria popular alcanzase los antepasados de los de la batea habían sido todos ellos contrabandistas, y con la historia de su familia, se podía hacer toda una historia del contrabando y sus artes en nuestras tierras, y de la evolución que el comercio local y los llamados delitos económicos, habían tenido a lo largo de los tiempos hasta nuestros días .

Ganados vacunos, mulas, cabras, monárquicos, hierba, centeno, trigo, liberales, telas, ron, de nuevo monárquicos, cerdos, caballos, otra vez los liberales, patatas, cebada, wolframio republicanos, ginebra ,güisqui, güinston, cámaras fotográficas, portátiles... habían sido llevados a uno y otros lados de las fronteras conforme cambiaban los gustos y las ideas de las gentes del lugar . Contrabando, comercio y política se había desarrollando con la familia de los de la batea hasta nuestros días y fueron creciendo a la par con las necesidades de los mercados locales.

Una voz muy fuerte gritó mi nombre: - ! mariseeeeeeeeeeeee ¡-
me desperté dando un salto de la cama.
Estaba sonando el teléfono. Lo cogí. Era mi madre que llamaba para decir que no llegarían hoy a casa de sus vacaciones porque al llegar a santiago les habían devuelto para madrid. El avión no podía aterrizar en el aeropuerto de santiago por la niebla que había.
- Cachis -, me dije yo, - después de hacer el zafarrancho general en la casa toda apurada ahora tenía un día más - .

Después de la fiesta que se había realizado festejando la primera captura de la temporada de pesca, el furgo estaba muy molesto por las risas de sus amigos porque la rusa se había despedido de él, cuando la dejó a primera hora de la mañana a la puerta de la chatarreria , con un beso en la mejilla mientras le decía con su horrible acento : -  ¡ Si calientas el horno no te olvides de cocer el pan ! -

A la noche sonó el teléfono en casa de marise. Marise fue corriendo, botando con sus pantuflas para coger el teléfono, pensando que eran sus padres. Descolgó el teléfono y al ponerse el auricular al oído oyó al otro lado de la linea la voz del furgo que le decía trabándosele la lengua -
-" La rusa, decir que submarino fácil de hacer. Decir que tener todo para hacer un submarino que poder cruzar la ria y poder llegar a altamar “ .- imitaba un horrible acento ruso.
- ¿ como dice ? - respondió extrañada Marise .
 El furgo se mostró sorprendido por la voz y dijo de nuevo balbuciendo :
- Ah ... perdón... me he confundido -.
- Clic ... pi, pi, pi... - se oyó desde el otro lado del telefono -

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lunes, 14 de mayo de 2012

un dia en el viaje de mis padres - 8



Aunque supuestamente mis padres están en Mallorca, están tomando un café en el Gambrinus en Nápoles. La mesa está próxima a una ventana por la que se ve la calle . Mientras mi padre habla mi madre mira a través de los cristales la gente que transita .
Los turistas van corriendo en dirección a la estación de Nápoles para coger el circunvesuviano (tren turistico que rodea al monte Vesubio) . También se puede coger un tren de cercanías en dirección para Sorrento para visitar Pompeya.
Pasa un autobus lleno de gente que van ver la preciosa bahía de Nápoles con el Vesubio a lo lejos.
Mas gente. Más mochilas. Pasan unos japoneses con sus cámaras fotográficas en dirección a la Basílica de San Francisco de Paula en la Piazza Plebiscito.
Mi madre, Dolores de Marise- no me queda más remedio que darle nombre a mi madre para facilitar el desarrollo de está historia - mira para el reloj. Ya es la hora, acaban de abrir las tiendas para poder ir de compras. Se dirige a mi padre y le da las últimas instrucciones, antes de salir a la calle Chiaia, una de las calles comerciales más conocidas de la ciudad.

No tardaron en entrar en unos grandes almacenes. Mi madre empezó a mirar prendas. Detrás de ella mi padre que cada cinco minutos: - Dolores de marise ... - por aquí-, Dolores de Marise ... - por allá.

Ya mi madre empezó a hartarse de tantos dolores, que decidió darle el esquinazo un rato a mi padre para quedar tranquila y poder mirar a gusto en el centro comercial. Subieron, bajaron y corrieron por las plantas del centro - mi madre jugando al despiste, mi padre que no se despegaba. Pero por suerte, en un momento en que subían usando las escaleras mecánicas,descubrieron el todo a cien para hombres en la cuarta planta y ahí consiguió mi madre zafarse de mi padre.

 Mi madre suspiro, Por fin libre para encontrar esa prenda  que no sabes que necesitabas hasta que la encuentras. Rebuscando en unos cajones llenos de rebajas, rodeada de un montón de mujeres italianas, halló un articulo de su interes . ! Un bolso de autentica polipiel de cocodrilo ¡ .

Fue directamente a preguntarle a una dependienta llevándole el bolso, que ya había adoptado, con el cuento de que si el articulo estaba bien de precio por que lo había visto. igualito en la feria, mucho más barato.
La dependienta ni papa de español.
No tardó en aparecer el jefe de planta y un corrillo de italianas tupefactas , * estupefactas, de ver la española que se enzarza discutiendo por el bolso con el recién llegado. El jefe de planta gesticulaba con las dos manos , con los dedos indice y pulgar cerrados como si tuviera cogida una pizza de pepperonis, que llevaba hacía el para morderla y devorarla a toda velocidad como si alguien se la quisiera quitar.

Las italianas se preguntaban que era esa mujer : Una respondía: - è lo spagnolo - *es española -¿ ma che sta dicendo ?- * que esta diciendo - se preguntaban mirando para esa madonna bajita , regordeta, con pelo blanco ... - ¿ gli spagnoli non sono come la mamma chicho ? - * ¿ Las españolas no son como las mama chicho ... ? - .

Mi madre, sintiéndose apoyada por el corrillo de italianas, igual que un jugador de fútbol por la afición, discutía el precio del bolso con el jefe de planta chapurreando en gallego como si estuviera en la lonja comprando el pescado.* - en gallego, si aquí no vamos hablar en italiano-.

- ¿ Come spagnolo ... ?-* ¿ como ... española ? - Se preguntaban .... las italianas - ¿ e che sta dicendo? .- ¿y que está diciendo ?- non vedete che parla molto male gli spagnoli - no ves que habla muy mal el español.

Y en ese momento se interrumpió la música de los grandes almacenes para oirse una voz que decia: ! madonna Dolores de Marise ... ¡ - ! Si prega di acerquese alle informazioni quarta piano vi aspettano ¡ - * por favor acerquese a información de la cuarta planta le están esperando-
- madonna dolores de marise , - Si prega di acerquese alle informazioni quarta piano vi aspettano, ....-
Mi padre de nuevo,- quien según mi madre, quiere acabar con sus nervios-,  que no habían pasado diez minutos sin ver a mi madre - .

Al salir de los grandes almacenes, no ponemos el nombre por que se lo hicieron prometer a mi madre no fuera que pensaran todas las españolas " como ella " que regalaban bolsos gratis - de autentica polipiel de cocodrilo -. Mis padres , pidieron un taxi para ir a recoger un coche que "sus amistades" de acá le tenían reservado: un viejo alfa romeo giulietta, negro ... como los que se ven en las películas policíacas que conducen los capos italianos.
En la tienda de alquiler, se quedaron perplejos al ver llegar a mis padres que venían a recoger el alfa romeo, pero entre el montón de euros que salieron del bolso – mi madre siempre paga al contado - y la pinta de mi madre, pensaron : ante la duda mejor no arriesgar la vida... que igual era la madonna de algún capo.


Van mis padres con el coche por Nápoles. Mi padre conduciendo, mi madre va callada pensando en lo ocurrido en los grandes almacenes - Es de esas mujeres que dentro de seis meses te dice : - ! Si, como aquella vez en nápoles que ....¡-

Suena la música en el aparato del coche : - Tu vuó fá l'americano .... -


Mi padre diez minutos a alta velocidad por Nápoles, - pobrecitos italianos, igual que en mi tierra cuando va por la autovía acompañado con un montón de coches en procesión que le siguen detrás... -

Un semáforo en rojo. Mi padre se detiene a cinco metros. Los peatones al ver ese alfa romeo negro seguido de tantos coches, le ceden el paso con su semáforo en verde, le saludan y hasta algunos bajan la cabeza en señal de respeto. Cambia de color el semáforo y continúan.

- Tu vuó fá l'americano ... l'americano -

Llegan a otro semáforo en rojo. El conductor de atrás le toca el claxon: Es un claxon tímido, como pidiendo perdón. Mi padre, al volverse para atrás, ve que el conductor le hace señales diciéndole que se salte el semáforo en rojo. Como mi padre continua parado con el semáforo en rojo, aparece un agente de la policía italiano que para el trafico y manda a mi padre que cruce. Al pasar el coche al lado del agente este saluda a mi padre con agradecimiento.

- Aquí no se conduce como allá - , haciendo referencia a nuestra tierra - , aquí se ve que tienen cariño al conductor - . Dijo mi padre.
Mi madre, miraba para mi padre y le decía que sería la crisis. Aunque para ella sus amigos le habían elegido bien el modelo de coche de alquilar, para que no tuviese ningún problema con la manera de conducir de mi padre.

Al llegar al hotel, no había sitió donde aparcar en la calle pero no tardó en aparecer un señor muy educado que les hacía señas con la mano diciéndole que se aproximaran a donde estaba él para aparcar en el único sitio que había libre: - en el medio y medio de la acera -

Entonces mi padre se negó en redondo a bajar del coche y regresar al hotel. Le dijo a mi madre que pudiendo conducirse así en italia , él no iba bajar hasta tener recorrido todo Nápoles en coche. Y la dejó marchar sola con sus bolsas para el hotel.

- Tu vuó fá l'americano .... l'americano, l'americano - .



lunes, 7 de mayo de 2012

El Golpe - 7



La rusa frecuentaba las tabernas, después de salir del trabajo por las tardes, porque gustaba de beber el vino mencía de nuestras tierras. Aún así por mucho que bebía rara vez se le había visto indispuesta. Alguna vez, cuando daban altas horas de la noche y el sueño le doblaba la cabeza, empezaba cantar unas canciones lentas y monótonas como el aire cuando mece los copos de nieve al caer, después de la ventisca . - Tenían un ritmo muy parecidas a las de por aquí que recuerdan  el ritmo de las ondas del agua del océano cuando su furia duerme apaciblemente -.

Aquella noche, en la cantina, mientras la sagrado llenaba sus vasos de vino, estaban los de las bateas esperando por el furgo, que le habían encargado el reparto de unas cajas de dinamita para los armadores que pescan al cerco la sardina.

La rusa, reía a pleno pulmón … y contaba una historia de su tierra.
Habían quedado para dar razón a una trucha de tres kilos que había pescado karuso – la primera captura de la temporada - y que le habían pagado con la recaudación de la maquina tragaperras de la estación de autobuses.

Cuando el furgo llegó, el pescador que también estaba convidado a la fiesta contaba como fuera su captura. Había estado desde primeras horas de la mañana subiendo y bajando por la rivera del rio, para llamar la atención  sin ser descubiertas sus intenciones por el pez .

Y después de merodear la presa, cuando vió el momento oportuno, el sisa se acercó a los moteros dirigiéndose al matón más feo, que con su cazadora de cuero negro se veía que era el jefe de la banda.

Lo llamó y le dijo: - oye tío , tengo un amigo que vende un televisor led de 54 pulgadas. Pasmate. ¡ por  300 euros !.
El motero, abrió los ojos mostrando sorpresa de que el sisa, con su figura menuda y esmirriada , se hubiera atrevido a hablar con él,
-No no, escucha - le dijo el sisa, acercándosele - esta nuevo, tiene garantía y todo  - insistía mientras prestaba atención a la ahora interesada falsa indignación de su victima -
- Mira, mira que te digo , escucha -
Estaba lanzando al agua el cebo para que lo mordiera el pez.
La voz del sisa estaba llena de eses y susurros, confabulandose con el motero, hablandole del televisor como los compinches cuando van a estafar a alguien.
 Su cabeza giraba para los lados. - Mientras se aseguraba que nadie le escuchaba se hacia oír por todos los presentes - .
-Tu ves el aparato y te convences - , le dijo el sisa de nuevo, y entonces le lanzó con picardía el anzuelo.
- Pero eso no es lo bueno, le puedes decir a tu mujer que te costó 600 euros y tu te puedes quedar 300 euros para ir a la concentración de moteros de jerez - .
Y ahí mordió la trucha, “ al mostrar interés “ pero aunque tenía dentro el anzuelo, recelaba aún de su presa y empezó a dar vueltas sin tragarse para dentro su cebo. 
- Vete por el televisor, y lo traes para que yo lo vea - le dijo el motero al sisa. 
Así que le fue dando cuerda hasta que llegado un momento tiró de nuevo de él.
El sisa. - si, pero mi amigo sino ve el dinero, no va venir con el televisor que lo tiene que traer en la furgoneta.
Más dudas, mas cuerda, y de nuevo un jalón a la presa .
- Mi amigo, si le llevo el dinero, te trae el televisor y después el ya te lo lleva a casa y te lo deja donde tu quieras, que va todos los días a coruña y no te va cobrar nada por ello -.

Y la trucha cayó presa tragando el cebo con todo el anzuelo.

Entre todos los componentes de la banda de moteros se juntaron los 300 euros que le dieron al sisa, dándole instrucciones claras de donde le esperaban y a la hora que quedaban para recoger y marchar temprano con el televisor para la coruña. - 

- Los últimos estertores de la captura -.


El sisa se marchó al vuelo con el botín, recuperando así la cantidad para pagar el arreglo de las ruedas de la camioneta del furgo que habían pinchado los moteros el día de la discusión.
Eran las dos, y el timo ya se había consumado. Los moteros estuvieron buscando y preguntando por el sisa toda la tarde por el pueblo, hasta que descubierto el engaño , avergonzados , se marcharon para la capital.

A nadie les preocupaba si querían venir a vengarse los moteros, por que ya tenían suficiente castigo con el escarnio y sabían que, por no pasar la vergüenza, ni soportar las risas, no se atreverían a regresar por aquí .

El sisa, después del reparto de las ganancias - un quinto para los de la batea, otro quinto para el peto de la iglesia , que se lo había prometido a san Nicolas para tener buen éxito con su golpe y recuperar así la confianza con sus amistades, y el pago del arreglo de las ruedas del furgo - le habían quedado treinta euros, con el que invitó a sus amistades a celebrar su éxito.
Después, de nuevo en la ruina, " aprovechando la ocasión", se decidió a robar un camión cargado de sacos de patatas para regresar a casa. Iba por la autovía cuando las sacos,- mal atados- empezaron a caer del camión , y finalmente fue detenido por la guardia civil de trafico, alertada por los conductores que llamaron por teléfono para avisar del peligro en la carretera.
El sisa, cuando era esposado por la guardia civil , pensaba en sus amistades de prisión y lo mucho que daría que hablar su golpe.
- No hay mal que por bien no venga - .


Ya entrada la noche y acabada la fiesta,- la trucha la habían comido frita con abundante jamón lo que había ayudado a beber el vino -  la rusa al despedirse le dijo a nuestros amigos con su horrible acento :
- ¿ Vosotros querer sumergible ?. Yo pensar en ello. Pronto daros respuesta. -.
Y después se llevó al furgo arrastro con ella. Quería probar su camioneta.